miércoles, octubre 15, 2003

A tu gracia

Empezar con el corazón en la nada
Y decirle al mundo que la vida es corta
La noche del mundo que no acaba
Había llegado en su inmensidad
Y pensé que no habría amanecer
Y pensé que me vería forzado
A vivir en un sueño eterno
La única salida a la oscuridad hiriente

Y entonces apareció a lo lejos
Débil al principio
Cómo un niño saliendo tímidamente de su escondite
Sobre mí lo que parecía una estrella
Y mis ojos deleitados ante tal visión
No pestañearon por tres noches seguidas
Y ella era lo único que importaba
Y fue por muchas noches mi sueño en vida

Y construí palacios en su nombre
Y pinté cuadros de dos colores sobre ella
Dulces melodías cantadas adornaron su luz
Pero ella seguía sobre mí, inmóvil
Fue entonces cuando su luz comenzó a desvanecerse
Y la desesperación despedazó mi alma
El deseo de alcanzarla movió mis manos
Hacia arriba fueron queriendo tocarla

Pero sólo sintieron el vacío
De la noche del mundo que no acaba
Y me di cuenta que no podía ser mía
Pues es su voluntad y no la mía
Empezar con el corazón en la nada
Y decirle al mundo que la vida es corta
Terminar con la mirada en una estrella
Y decirle al mundo que quiero estar con ella


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