(Con voz de Don Francisco) ¡Que dice el público!

¡UPDATE!

Y el maestro respondió: "Que así sea..."

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Pasa que...

Suelo pensar que soy una persona agradable. Que por lo general le caigo bien a las personas y por lo tanto suelo cosechar amistades fácilmente por aquí y por allá. Gracias a eso, y sumado al hecho de que tengo (creo yo) buen tino, no suelo enemistarme con frecuencia con las personas y mi pasar por este mundo en el ámbito social suele ser tranquilo y sin muchos contratiempos. ¿A que vá todo esto? Bueno, resulta que el día miércoles pasado si mal no recuerdo, estaba en clases cuando una amiga me pidió devolverle cincuenta pesos a miss red por lo que procedí a dirigirme hacia ella moneda en mano y en el trayecto se me ocurrió decirle algo pesado (algo que no me había atrevido a hacer hasta ahora) y al momento de pasarle la moneda le dije "gracias por tus servicios", a lo que ella respondió "y tú que te hay creío?" acompañado de una cara de malas pulgas. Pasó el rato y llegó el momento de irnos. Uno de los logros que había logrado (redundancia) con miss red era el hecho de que ella se despedía de mi cuando se iba, pero esta vez pasó por mi lado con cara de Mario, perdón, de nada y pasó sin despedirse. En ese momento pensé al tiro: "se enojó". Al otro día llegué de los primeros a clases y no había nadie, al rato llegó miss red y me dijo "contigo quiero hablar". Por más que hubiese querido que aquello hubiese sido una conversación terminó siendo un monólogo. Mi mente se esforzaba por tratar de procesar la avalancha de palabras que salian de la roja boca de miss red y que cual aplanadora pasando por encima de un huevo no me permitió lo que es una sola respuesta a sus reclamos. En resumidas cuentas me dijo que no quería saber nada más de mi y que no le hablara más. Es la peor "foca" que he recivido en mi vida. Todo lo que había logrado con ella se fué a la mierda en un instante y por una mala ocurrencia.
El viernes, en clases, y debido a una broma que miss red cachó mal, comenzó la avalancha nuevamente, sólo que esta vez fue contra el Mauricio, el Pablo y yo obviamente. ¿Que es lo que pasa con miss red? ¿será el período de sensibilidad por el que la mayoría de las mujeres pasa cada mes, todos sabemos porqué? Lo medité por un rato y gracias también a la conversación que tuve con una amiga, llegué a la conclusión de que me echó la foca para "deshacerse" de mí. ¿por qué? Debe haber cachado que me gustaba y encontró la excusa perfecta para que la dejara de molestar en la broma que le hice ese día. Es inteligente y astuta. Pero con esa actitud sólo algo me queda claro: Esa mujer no vale la pena.

Puede ser... porqué no...


What Is Your Animal Personality?
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Ya lo decia yo... todo lo que tiene un comienzo tiene un final. ¿Será este el patetico final de una amistad que ha durado años? ¿Será la actitud descarriada e irracional (por no ponerle peores adejtivos) de una de las dos partes, el comienzo del fin? Que pena me da. Ya han pasado tres días desde el incidente y no he recibido respuesta o actitud de reconciliación de su parte. De inmediato llegan a mi las memorias del incidente Remis-Chelo. ¿Estaré siendo muy orgulloso?¿Debería acercarme yo para solucionar nuestras diferencias? No lo creo. Y la respuesta es simple. No fui yo el que lanzó las piedras a diestra y siniestra contra un amigo. No fui yo el que con malicia en las palabras pretendió imponer un punto de vista a todas luces erróneo. Por suerte hubieron testigos y no me siento solo en mi postura. Lo conversé con personas adultas y de mi edad por igual. La respuesta fue sólo una: "Es la clara postura de una persona inmadura". En ese aspecto me siento bien, el saber que estoy en el camino correcto me consuela y por otra parte el saber que la persona (a quien creía conocer) que me hirió, debería pensar un poco más y replantear su actitud me preocupa pues sé que en cierta manera es cerrado de mente y es más propenso a tratar de cambiar la actitud de los demás que a cambiar la suya. Sin embargo tengo esperanzas. Esperanza de que para él nuestra amistad signifique más que el hecho de admitir una equivocación. Esperanza de que para él nuestra amistad valga más que nuestras diferencias...